Un día me enamoré de una nube. Era preciosa, perfecta en sus formas y en su color, era la nube de mi vida, pero de repente la nube se fue diluyendo; pensé que la perdía pero no, esa nube se hizo lluvia y cayó sobre mi rostro y cayó sobre el mar y sobre los ríos, y el sol la hizo de nuevo convertirse en bruma, en niebla, en otra maravillosa nube, y me di cuenta de que de ese modo mi nube siempre estaría conmigo.
Texto publicado en "El pequeño libro de la felicidad" de Ángel Rielo.
Nube con forma de corazón |
Moraleja: nadie muere si no es olvidado. El alma jamás desaparece, la energía nunca se destruye, solo se transforma.
FUERZA A TODOS LOS QUE HAN PERDIDO A UN SER QUERIDO POR CORONAVIRUS 💪❤️
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