Ir al contenido principal

Las pinceladas de Alena Shymchonak

Alena Shymchonak (Estonia, 1986) es una artista profesional independiente que pinta el mar y la playa con espátula. Esta pintora impresionista transmite energía, calor e ilusión en cada una de sus obras y su enorme talento otorga vida a sus creaciones. 

Obra de Alena Shymchonak

Desde que en su infancia su madre le animase a pintar, nunca ha dejado los pinceles. En sus inicios dibujaba todo el día e incluso tenía un gran interés por el diseño de interiores. Pero su corazón, afortunadamente, pertenecía a la pintura y es ahora cuando ha logrado el reconocimiento internacional que se merece gracias a las colecciones que ha expuesto en todo el mundo. 

Sus obras son tan veraniegas que dan ganas de darse un buen chapuzón en esos mares de espumosas olas o de broncearse al sol bajo una de esas coloridas sombrillas. ¿Conocías su trabajo? 

El mar y la playa que pinta Alena

Ya solo quedan 3 domingos para que sea verano. De momento, disfrutemos del final de la primavera, porque cada estación tiene su propia magia. 

Comentarios

  1. Muy buena entrada, me ha gustado su arte. Saludos👋

    ResponderEliminar
  2. Si soy fan su perspectiva casi caballera le da tbn ese toque naif que me chifla, y tanto color siempre alegre te dibuja sonrisa y evoca millones de recuerdos , Gracias Iker

    ResponderEliminar
  3. Me gusta su obra, su colorido, su perspectiva de ver lo que la madre naturaleza nos regala. Un abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Los secretos de belleza de Audrey Hepburn

Cuando le pidieron que revelara sus secretos de belleza, la actriz Audrey Hepburn escribió este poema, que fue leído en su funeral: Para tener labios atractivos, pronuncia palabras de bondad. Para tener hermosos ojos, mira lo que la gente tiene de hermoso en ellos. Para mantenerse delgada, comparte tus comidas con los que tienen hambre. Para tener un buen cabello, deja que un niño pase su mano todos los días. Para tener un buen mantenimiento, camina sabiendo que nunca estás sola, porque los que te aman y te han amado te acompañan.   Las personas, más que los objetos, necesitan ser reparadas, mimadas, alegradas y salvadas: nunca rechacen a nadie.   Piensa en ello: si algún día necesitas una mano de apoyo, encontrarás una al final de cada uno de tus brazos.   Al envejecer, te darás cuenta de que tienes dos manos, una para ayudarte a ti misma, la otra para ayudar a los que lo necesitan. La belleza de una mujer no está en la ropa que lleva, su cara o su manera de arreglar su cabello. La be

Adivina la película

¿Te consideras una persona cinéfila o experta del séptimo arte? Si adivinas qué 30 películas se esconden tras los simpáticos emojis del WhatsApp, entonces es que lo eres.  Películas con emojis Venga, demuestra todo lo que sabes. ¡Comenzamos! 1. 👶👓⚡️🏰✨🎓💫😱😵 2. 🇯🇵💣🇺🇸⚓️ 3. 👨🏻👨🏻🏕❤️🗻 4. 👦🏾📞🎉💰🚆👫 5. ✏️📒👫❤️ 6. 🌊🌊🌴🌴👨‍👩‍👦‍👦🏥 7. 🏠😱🎄👦🏼 8. 🍬🏃🏻🏃🏻🏃🏻🏃🏻 9. 👴🏼➡️👨🏼➡️👦🏼➡️👶🏼 10. 4️⃣👰🏻1️⃣⚰ 11. 😈👗👠 12. 👽🚲🏠☎️ 13. 👧🏼👜🌂🎶 14. 🍴🙏🏼❤️ 15. 📖🌴 16. 🕒🔧🍊 17. 🔪👩🏻🚿 18. 💩💃💃 19. 🐛🐜🐞🐜 20. 👦🏻🍫🏭 21. 🐀🍝🍛🍲🍜 22. 👥 23. 👦🏻💍➡️🌋 24. 👼⛪️😈 25. 🚢 26. 🌃🏤👨🏻🔦🗿🐒 27. 👦🏻✂️🙌🏻 28. 🌅🦁👑🐗🐘 29. 👸📝 30. 🌍🙊🙉🙈🐒🐵 Niño pensativo ¿Listo? Comprobemos los resultados.  Soluciones: 1. Harry Potter 2. Pearl Harbor 3. Brokeback Mountain 4. Slumdog Millionaire 5. El diario de Noa 6. Lo imposible 7. Solo en casa 8. Forrest Gump 9. El curioso caso de Benjamin Button 10. Cuatro

Sonríe, eres hermosa

¿No les ha pasado alguna vez que miran a otra persona de su misma edad y piensan: ¿Seguramente yo no puedo parecer tan viejo? Bueno, lean la historia que le pasó a una amiga: Mi nombre es Cornelia y estaba sentada en la sala de espera de una terminal de autobuses. Al subir al camión, rumbo a mi destino estaba colgada la credencial del chófer, con su nombre completo. De repente recordé a un muchacho alto, buen mozo, pelo negro, que tenía el mismo nombre y que estaba en mi clase en la Secundaria como 35 años atrás... ¿Podría ser el mismo chico por el cual yo estaba secretamente enamorada? Pero después de verlo manejando el camión, rápidamente deseché esos pensamientos. Era un hombre pelón, canoso, y su cara estaba llena de arrugas, y lucía muy viejo como para haber sido mi compañero de clase. Después de revisar mi boleto de viaje, le pregunté si había asistido a la secundaria 35 años atrás.  Sí, sí, sonrió con orgullo. Le pregunté: ¿Cuándo te graduaste? Me contestó, en 1982, ¿por qué me