Rosalía acaba de lanzar su cuarto y último disco de estudio: Lux, una propuesta radicalmente distinta que mezcla ópera, espiritualidad y hasta 14 idiomas, incluyendo español, catalán, inglés, latín, japonés, italiano, alemán, ucraniano, árabe, siciliano, francés, mandarín, hebreo y portugués.
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| Portada del disco |
Se trata de un álbum compuesto por 15 canciones (18 en su edición física CD/vinilo) y que está estructurado en cuatro movimientos, con un toque conceptual y orquestal.
Björk, Carminho, Estrella Morente, Silvia Pérez Cruz y la Orquesta Sinfónica de Londres colaboran en este disco que se aleja del reguetón y lo urbano de Motomami. La catalana, de 33 años, canta al desamor –incluye referencias a exparejas como C. Tangana y Rauw Alejandro–, la búsqueda de Dios y el empoderamiento femenino.
Tras una primera escucha, los temas que más me han atrapado son: Reliquia, La perla, Dios es un stalker y La rumba del perdón. Confieso que mi debilidad sigue siendo la Rosalía flamenca. Este disco exige más de una escucha: cada detalle, cada insinuación, merece ser descubierto con calma.
Incluso Madonna ha caído rendida ante Lux. Compartió la portada del álbum en sus historias de Instagram y escribió: “Gracias, Rosalía. No puedo parar de escucharlo. Eres una verdadera visionaria”, comentario que ha sido ampliamente difundido en medios como El Periódico, Cadena 100, Marca y HuffPost, y al que Rosalía no ha tardado en reaccionar con emoción, repostando el mensaje y agradeciendo el gesto.
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