El desastre de la DANA en Valencia ha puesto de manifiesto la solidaridad del pueblo, pero también la mala gestión política y la tardía ayuda de ciertas instituciones de carácter voluntario como Cruz Roja Española, que en lugar de colaborar y organizar las labores de limpieza y reparto de alimentos y material en los municipios afectados por la gota fría, ha entorpecido el trabajo y la colaboración de los voluntarios.
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| Vecinos de Paiporta acuden a por agua |
Entonces, ¿funciona esta organización o no es más que un chiringuito con el que unos pocos se enriquecen a nuestra costa? La vicepresidenta de la Fundación Cruz Roja, Therese Jamaa, es la novia del ministro de Exteriores, José Manuel Albares. Jamaa nació en Beirut y es refugiada, huyó de la guerra junto a su familia a los 12 años. Sea o no una enchufada más en Cruz Roja, la ONG recibió más de 600 millones de euros en subvenciones del Gobierno en 2023.
Y yo me pregunto: ¿Dónde se invierte o en manos de quién acaba todo este dinero? Porque la respuesta de Cruz Roja en esta catástrofe ha sido lamentable y muy criticada por muchas personas solidarias que de una u otra forma han arrimado el hombro tras la tragedia. Críticas que muchos medios de comunicación y periodistas de pacotilla desmienten o tildan de bulos.
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| Vecinos y voluntarios limpiando |
Por cierto, fijaos si esta institución hace una labor encomiable que el 92 % de lo recibido por el Gobierno en 2023 fue a gastos de personal, el equivalente a 475 millones de euros. ¿De verdad vamos a mantener a toda esta gentuza que no da un palo al agua y solo auxilia a inmigrantes ilegales? Primero nuestros vecinos valencianos.
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